Conociendo a Buda.

La mejor explicación de las enseñanzas del Buda proviene del Buda mismo. En sánscrito las enseñanzas se llaman Dharma, y en tibetano Chö. Ambas palabras significan “las cosas como son”. Por lo tanto, el Budismo puede ser visto como un conjunto de herramientas que nos permiten ver las cosas como realmente son aquí y ahora. El Budismo no tiene dogmas y permite que signos de interrogación sean colocados en todas partes. Las enseñanzas del Buda tienen por objeto el pleno desarrollo y libertad de cuerpo, habla y mente.

El Budismo es un camino de enseñanzas prácticas. Las prácticas Budistas, tales como la meditación, son un medio para que uno mismo se transforme, desarrollando las cualidades de consciencia, bondad y sabiduría. La experiencia desarrollada dentro de la Tradición Budista durante miles de años creyó un recurso incomparable para aquellos que desean seguir un sendero del desarrollo espiritual. El sendero Budista nos lleva a lo que se conoce como Iluminación o Budiedad.

¿Quién fue Buda?

La palabra Buda es un título o un epíteto y no un nombre. Significa «alguien que está despierto» en el sentido de haberse «despertado a la realidad». El título describe el logro de un hombre llamado Siddharta Gautama, quien vivió hace 2,500 años en el norte de la India en la familia real de una cultura altamente desarrollada. El joven príncipe gozó de circunstancias extremadamente privilegiadas y hasta la edad de 29 años, sólo había conocido placer. Dejando su palacio por primera vez, su mundo se puso al revés. Durante tres días consecutivos vio una persona muy enferma, alguien viejo y alguien que había muerto. En su reconocimiento de la inevitabilidad de la vejez, la enfermedad, la muerte y la impermanencia de todas las cosas, se puso profundamente agitado. A la mañana siguiente, pasó cerca de un yogui en meditación profunda y sus mentes se encontraron. Inspirado por esto, el príncipe entonces dejó su hogar y familia, y wandered el país en la búsqueda de enseñanzas que pudieran superar la muerte y el sufrimiento. Él estudió con diversos maestros, pero ninguno de ellos lo podían conducirlo a su meta final/última.

A la edad de 35, después de seis años de meditación profunda, realizó la verdadera naturaleza de la mente y se iluminó. Durante los restantes 45 años de su vida viajó por gran parte del norte de la India, diseminando su enseñanza del sendero hacia la Iluminación. Su enseñanza se conoce en el Oriente como el Buddha-Dharma – «la Enseñanza del Iluminado».

Viajando de lugar a lugar, el Buda enseñó a numerosos discípulos, muchos de los cuales lograron también este estado de Iluminación. Ellos, a su vez, enseñaron a otros y de este modo una cadena ininterrumpida de enseñanza que continua hasta el día de hoy.

El Buda no era un Dios ni profeta de Dios, tampoco se declaró como un Ser divino. En el Budismo no existe el concepto de un Dios creador. El Buda fue un ser humano quien, a través de esfuerzos tremendos, se transformó y trascendió su limitación humana creándose en el un nuevo orden de Ser: Un ser Iluminado.

El estado de Iluminación que alcanzó tiene tres facetas. 1) Es un estado de «Sabiduría», de ver las cosas como realmente son. 2) Es una fuente de «Compasión» o Amor que se manifiesta en una actividad constante para el beneficio de todos los seres. 3) Y es la liberación total de las energías de la mente y cuerpo para que estén al servicio de la mente plenamente consciente.

Este concepto de la Iluminación no se conoce en Occidente donde tenemos limitados entendimientos de la capacidad espiritual que la vida ofrece. Algunos estudioso la interpreten en un sentido humanístico como llegar a ser un humano ético y con cualidades morales, careciendo de un orden espiritual. Otros entienden la meta en términos de un dios mas allá de todo y creador de las cosas, la meta en este caso seria comunión o unión con él.

¿Que enseña el Budismo?

El Budismo ve a la vida como un proceso en constante cambio y sus prácticas tratan de tomar ventaja de éste principio inherente de las cosas. Esto significa que uno puede cambiar para mejorar. El factor decisivo para transformarnos es la mente y el Budismo se ha desarrollado muchos métodos para trabajar con la mente. Uno de los principales es la meditación, la cual es una forma de desarrollar estados mentales más positivos caracterizados por calma, concentración, consciencia y emociones como la amistad, ecuanimidad y felicidad. Usando la mente clara y positiva que se desarrolla en la meditación, es posible tener una mayor comprensión de uno mismo, de los demás y de la vida misma.

Los Budistas no buscan «evangelizar» o coercer a otras personas para que adopten su religión, pero sí ponen sus enseñanzas a la disposición de quien esté interesado. La gente tiene la libertad de tomar lo poco o mucho para lo que se sientan listos. Muchas personas toman las practicas de la meditación o la filosofía de vida del Budismo para mejorar sus vidas sin ser estrictamente Budistas aun.

¿Cómo se convierte uno en Budista?

Convertirse en Budista en el sentido completo implica comprometerse con los Ideales centrales del Budismo. Estos son el Buda, o el ideal de la Iluminación; el Dharma, las enseñanzas y prácticas del Budismo; y la Sangha, la comunidad de personas que también están siguiendo el camino quienes aportan amistad, estímulo, inspiración y guía. La ordenación en la Orden Budista Occidental significa comprometerse a estos ideales. No implica un estilo de vida en particular. De esta forma rompemos la dicotomía entre monjes y laicos que se observa en algunos países de oriente.

El camino Budista está abierto a todos por igual: a hombres y mujeres, jóvenes y viejos, gente de todas las nacionalidades, razas y antecedentes.

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Hay que comenzar por el principio.

Como dice mi mamá lo primero es lo primero y pues para poder crear nuestro propio mundo de Sofía uno primero tiene que saber algunas cosas, no se puede uno andar creando filosofías de vida por ahí a lo loco sin ni siquiera tener en claro lo que la filosofía es, por eso a comenzar por el principio. A recorrer este mundo que soy, a descubrirme, a conocerme y a reconstruirme desde cero.

Primera parada, La filosofía.

 

¿Qué es la filosofía?

Buscando y explorando en distintos sitios de Internet he encontrado varias definiciones de lo que es la filosofía, todas básicamente parten de su origen y de ahí cada quien ha desarrollado su idea con uno que otro pequeñito cambio.

Pues así tenemos entonces que la filosofía proviene del latín philosophĭa, y este del griego antiguo φιλοσοφία, que significa «amor por la sabiduría». La fiel y leal Wikipedia nos da una definición bastante básica pero acertada y nos dice que: “es el estudio de una variedad de problemas fundamentales acerca de cuestiones como la existencia, el conocimiento, la verdad, la moral, la belleza, la mente y el lenguaje”. A mi por mi parte me gusta más esta otra que encontré por ahí en el sitio definicionesABC: “Al margen de su significado etimológico, la filosofía es una disciplina que nació en occidente como respuesta a los planteamientos míticos de la cultura griega, lo cual significó sustituir la mentalidad mágica por una nueva forma de pensar, la racional. Por otra parte, la filosofía puede analizarse en función de las distintas ramas que la integran (metafísica, lógica, epistemología, ética y otras áreas)”. En conclusión, los problemas filosóficos surgen de dos puntos principales: el hombre y su relación con el universo. La filosofía ha intentado siempre saber y ofrecer una explicación de la existencia, una visión justa de la realidad, e incluso cuando ha negado la posibilidad de alcanzar tal conocimiento, ha pretendido fundar en argumentos dicha opinión.

La filosofía se divide en varias ramas de investigación: ontología y metafísica (análisis crítico de la estructura de la realidad); teoría del conocimiento, epistemología o gnoseología (estudio del origen, estructura y alcance del conocimiento); lógica (exploración del razonamiento o argumento válido); ética (análisis de la acción humana y de sus valores); y estética (teoría de la belleza y del arte).

La reflexión metódica busca la manera de redefinir los pensamientos, cuestionando al hombre, como es su vida, haciendo que valore su existencia como ser creado, al abrir la mente humana se forma una sociedad, llevando consigo los diferentes dilemas y conflictos, una pregunta tras otra que sin respuestas se amontonaban, así el libre pensador tomo tiempo y espacio para dar cabida a los cuestionamientos más primitivos y tratar de dar orden a los códigos del universo que es tan extenso como la mente humana.

La filosofía enseña a pensar dotando al más incompetente incapaz en las capacidades requeridas para poder llevar una base de argumentos diarios para afrontar la vida, se centra en el conocimiento humanístico del ser y estar, dando una mayor satisfacción al ser más comprensivo y poder descifrar lo que ocurre y por qué, no es una guía para el futuro sino que al estar en tiempo presente disfruta más de la vida, ya que no es el destino sino el viaje, en cómo lo vives, al no tener una especie de mantra filosófico se cree que estas desconectado de tu ser y se pierde en lo cotidiano del vivir, se conecta por todas partes desde la ambigüedad misma, la toma de decisiones, lo analítico, la claridad de lo complejo a lo simple y sencillo a una falsa ética impuesta, daña el espíritu libre como lo político, se enfrasca en lo posible como lo válido, no en juicios de injusto a justo, solo hay experiencias de vida siendo metafórica como el maestro que enseña al pez a salir de la red de pesca. ¿Quién es el pez? ¿ y ¿cuál es su red?, el filósofo es quien desde el desorden ordena llevando consigo a su discípulo de un lado a otro, desde un mundo de apariencias a una real. No se puede definir en su totalidad porque sería como encerrarlo, acabarlo y darle un término finito, ser filósofo o tener una filosofía nunca se llega a terminar ni completar, se está en constante movimiento de pensamiento esto quiere decir que es movible, flexible, que está en constante construcción por lo tanto está viva. Ella, la filosofía no es exacta, no especula y se modifica con el pasar del tiempo haciéndose cada vez más confusa para algunos, ya que la verdad siempre es relativa y no es necesariamente y absolutamente correcta, que alimenta las expectativas por una necesidad de la propia vida; ya que la misma consiste en retos, barreras, como logros supremos de llegar a un término explícito, para así derribar las creencias e implantar nuevas, como reafirmar las viejas y sentirse grande ante los pensamientos.

Ahora bien sabiendo ya lo que es la filosofía y a que se busca llegar con ella puedo empezar entonces a desarrollar o armar mi propia filosofía de vida, a reflexionar, a cuestionar y a hacerme las preguntas adecuadas que me llevaran por el camino que empiezo a emprender, por hoy me despido pero esto es solo el inicio.

 

El mundo no se construyó en un día.

Bless